MUJER RENOVADA

MUJER RENOVADA

Por: Mariana Estrada

Todos los días las mujeres enfrentamos situaciones que nos desgastan, las múltiples responsabilidades y las preocupaciones muchas veces nos quitan la fuerza y la esperanza. Sin embargo, la Palabra de Dios nos recuerda que cada día podemos ser renovadas por el poder de Su Espíritu. Veamos tres puntos importantes.

DESPOJAR

Lo escrito en el libro de Hebreos 12:1: “Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan gran nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante”; hace referencia a la carga de nuestros pecados y como el poder despojarnos de ellos nos permite acceder a la libertad que Cristo nos ofrece.

En este contexto, «despojarse» significa dejar atrás nuestras antiguas formas y actitudes, renovar nuestra mente y revestirnos con la «nueva naturaleza» que se asemeja a la naturaleza de Dios. Este proceso de «despojarse» y «revestirse» es esencial para el crecimiento y desarrollo de una hija de Dios.

Para ser mujeres renovadas, primero debemos despojarnos de lo que nos estorba, dejando atrás, por ejemplo: los malos pensamientos, el orgullo, las malas amistades, entre otros. Todo lo que nos limite en nuestra relación con Dios.

RENOVAR

Solo después de dejar “lo viejo” podemos comenzar a renovar, y al hablar de renovación, surgen ideas sobre cambios que deseamos implementar en nuestra vida, cambios físicos, como renovar nuestro closet, cambiar zapatos, hacernos un nuevo corte o tinte, incluso planear ir al gimnasio para transformar lo externo.

Sin embargo, dejamos de lado lo más importante: «nuestra mente». Romanos 12:2

La mente es el centro de nuestros pensamientos, emociones y decisiones. Como seguidoras de Cristo, la renovación de la mente es un proceso vital para vivir una vida en conformidad con la voluntad de Dios, y esto solo se puede conseguir de manera intencional y diaria.

La verdadera renovación viene del Espíritu Santo que nos transforma desde adentro y únicamente podemos ser transformadas por la Palabra de Dios, la oración, la meditación en Sus obras. Podemos tener muchos cambios externos, pero si no somos renovadas en nuestra manera de pensar, no veremos frutos reales.

VESTIR

Cuando Dios nos renueva, nos viste de algo nuevo: justicia, amor, humildad y verdad. Cada una de nosotras debe vestirse del “nuevo hombre”, tomando la decisión de reflejar a Cristo cada día, tomando el compromiso de adoptar la identidad que Él nos da: somos amadas, perdonadas y transformadas.

Su Palabra dice: “y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad”. Efesios 4:24

Para terminar, reflexiona, ¿Qué áreas de tu mente o corazón necesitan ser renovadas por Dios? ¿Con qué virtudes quieres vestirte diariamente para reflejar a Jesús?

El teólogo y predicador John Piper, escribió: «cuando tu mente está llena del amor de Cristo y con toda la plenitud de Dios, entonces el espíritu de tu mente se renueva y se libera del engaño del mundo. Y de esa mente renovada surgen nuevas actitudes, emociones y prácticas, y te visten de justicia y santidad. Y esta nueva persona en la que te conviertes es en verdad la creación de Dios mismo, y a Él pertenece toda la gloria por los siglos de los siglos. Amén»

ORACIÓN.

Señor, hoy puedo identificar todo lo que tengo en mi interior y que no te honra, ayúdame a renovar y transformar mi mente y mi ser; dame fuerza y determinación para reemplazar todo eso que no te agrada, incluyendo mis pensamientos, cámbialos con tu Verdad.

Estoy confiada y segura que veré esa transformación y me otorgarás la oportunidad de poder enseñar a mi familia y a los que me rodean sobre tu poder, amor y misericordia. En el nombre de tu Hijo Amado Jesús, Amén.

¡Dios te bendiga! 💜🤗

#NuevaMujer #LunesDeReflexión #Mujeres #UnaVozDeDiosParaTi #VidaCristiana #FE

Deja un comentario