PERSUACIÓN

persuación

Persuadir es inducir, motivar o impulsar a alguien (por medio del razonamiento) a creer en algo, o a hacer algo. Los cristianos estamos llamados a convencer, a persuadir a aquellos que todavía no han creído en Jesucristo llevándoles el mensaje de salvación y vida eterna en Cristo Jesús para sus vidas.

Es obvio que para tener la libertad de hablarle a otras personas de Cristo y para poder persuadirlos que necesitan reconocer a Jesucristo como Señor y Salvador, primero necesitamos estar totalmente persuadidas nosotras, así como conocer de lo que estamos hablando.

Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de quién has aprendido; y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús.”  2 Timoteo 3: 14-15

El argumento más impactante para persuadir a alguien sobre el mensaje de Dios, es que vea mi vida transformada.

Entonces, ¿por qué en lugar de enseñar a otros no te enseñas a ti mismo? Tú le dices a la gente que robar no está bien, pero robas.   Dices que no se debe cometer adulterio, pero cometes ese pecado. Dices que detestas a los ídolos, pero entras a los templos a robarte esos ídolos.  Te sientes muy orgulloso de decir que conoces la ley de Dios, pero deshonras a Dios cuando no la cumples.   Por eso está escrito: «Los que no son judíos insultan a Dios por culpa de ustedes». Romanos 2:21-24 PDT

Ciertamente, sería muy difícil encontrar a una cristiana o cristiano que sea “perfecto”, hasta el apóstol Pablo decía que él no lo había podido lograr, pero que seguía trabajando en su vida para lograrlo. (Filipenses 3:12)

Por eso, a pesar de nuestras imperfecciones, es necesario que cada día nos ocupemos en vigilar nuestros pensamientos, actitudes y acciones para que nuestra vida demuestre que realmente hemos creído en Dios y que Él sí puede cambiar a las personas.

Nosotras somos embajadoras de Cristo, por lo tanto es necesario que cuando le hablemos a otras personas, nos detengamos y pensemos antes de hablar. No intentemos “imponerles” nuestra fe en Cristo porque de esta forma probablemente vamos a encontrar rechazo. Es mejor que primero escuchemos sus necesidades y luego les hablemos de cómo en Jesús nosotras encontramos la paz y una nueva vida.

Esforcémonos para que cada día “Cristo crezca en mí” y así mi vida sea un testimonio efectivo que respalde a mis palabras cuando le hable de Cristo a otras personas.

FORMADA PARA SERVIR A DIOS

formada para servir a dios

 

“Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano a fin de que las pongamos en práctica”. Efesios 2:10 (NVI)

Tú fuiste puesta en la tierra con un propósito, servir a Dios y a los demás. Cuando servimos a otros verdaderamente servimos a Dios y cumplimos Su propósito. No estamos sólo para respirar, comer, divertirnos y ocupar un espacio, sino para hacer buenas obras, porque no somos salvas por las obras, sino somos salvas para hacer buenas obras.

En Mateo 20:27-28, Jesús nos dice: “Tu actitud debe ser igual a la mía, porque yo, el Hijo de Dios, no vine a ser servido sino a servir y dar mi vida por ustedes.” (BAD)

Jesús vino a servir y dar, y esos dos verbos también pueden definir tu vida en la tierra, servir y dar.

Dios te da oportunidades, te abre espacios, abre puertas y a veces las cierra, Dios te da, habilidades y dones diferentes, los cuales pueden ser físicos, como: facilidad de palabra, voz para el canto, don para la pintura, la danza, la música, finanzas, o pueden ser también recursos económicos.

En Hechos 9:36 al 43 se nos cuenta la historia de Tabita o Dorcas quien era discípula del Señor, dice que ella abundaba en buenas obras y en donaciones que hacía, estas buenas obras resultaron ser túnicas y vestidos que ella confeccionaba con sus propias manos, para luego hacerlos llegar a las personas que necesitaban ropa para cubrirse. Vemos que esta mujer, utilizaba los dones manuales y creativos para ayudar a las personas con necesidades, invertía sus recursos con el fin de que otros fueran beneficiados.

La Biblia dice: ”Cada uno ponga al servicio de los demás el don que haya recibido, administrando fielmente la gracia de Dios en sus diversas formas”. 1 Pedro 4:10 (NVI).

Probablemente situaciones y circunstancias intentarán robarte el gozo de tu servicio para Él, experiencias que muchas veces son procesos dolorosos, pero que al final tienen un propósito en tu vida y en la de los demás. (2 Timoteo 2:15, Romanos 8:29).

Fuimos creadas para Su gloria y estamos siendo formadas cada día para parecernos más a Él. Descubre lo que te gusta hacer, lo que puedes hacer y úsalo para Su gloria.

#NuevaMujer #LunesDeReflexión #UnaVozDeDiosParaTi #Servicio

FE NO FINGIDA

 

FENOFINGIDA

3Doy gracias a Dios… que… me acuerdo de ti en mis oraciones noche y día… 5trayendo a la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice, y estoy seguro que en ti también.”  2ª. Timoteo 1:3-5

Cuando el apóstol Pablo escribe: “la fe no fingida en el corazón de la abuela Loida y de la madre Eunice”, está hablando del “conocimiento de la Palabra de Dios” que se había hecho “vida” en cada una de ellas.

Ellas dos caminaron y vivieron conforme a la verdad de Dios y no “conforme a una verdad aprendida en el mundo…” y por eso fueron capaces de transmitir su fe a Timoteo, porque respaldaban su enseñanza con su manera de vivir, por lo tanto se convirtieron en el mejor ejemplo que Timoteo podía seguir.

FINGIR es dar a entender algo que no es cierto, sino que solamente se finge o aparenta…

Muchas veces no nos damos cuenta que como madres y como abuelas, somos los modelos para los nietos y nietas, hijas e hijos, y principalmente que somos las que podemos sembrar en ellos una “fe real”.

Necesitamos entender que Dios nos ha dado sus mandamientos para que nos vaya bien, por lo tanto la Palabra de Dios es el Código de conducta bajo el cual debe estar dirigida la vida de toda mujer que ha creído en Cristo Jesús.

Jesús nos ha revelado a su Padre en Él, para que así como esas mujeres supieron ver y entender su papel fundamental en la formación de Timoteo, nosotras no nos olvidemos que esa “fe no fingida” de la que habla el Apóstol Pablo tiene mucho valor y les da seguridad a nuestros hijos y nietos.

La razón por la que ellas pasaron a la historia fue por su fe no fingida, y porque no se empeñaron en enseñar “lo que ellas creían”, sino que ellas enseñaron la verdadera revelación de Dios que es la única que puede dar fruto verdadero y duradero.

Oramos a Dios para que esta reflexión sea de edificación para tu vida.

#LunesdeReflexión #NuevaMujer #UnaVozDeDiosParaTi

¿QUÉ VEN EN TI?

QUEVENENTI
Quienes te rodean, ¿qué ven en ti? ¿Tu vida diaria merece el respeto de los demás? ¿Los inspira a desear vivir una vida como la tuya?

«y que procuren vivir en paz, y ocuparse de sus negocios y trabajar con sus propias manos, tal y como les hemos ordenado, a fin de que se conduzcan honradamente con los de afuera, y no tengan necesidad de nada.» 1 Tesalonicenses 4:11-12 (RVC)

Un cristiano es representante de Cristo en la tierra y está llamado a vivir una vida diferente que lo distinga y que le de gloria a Dios. (Embajadoras de Cristo. 2 Corintios 5:20)

Los cristianos deben vivir su vida para Dios. Que todo lo que piensan, dicen o hacen refleje que Dios gobierna sus vidas, y que le dan honra a Dios y lo glorifican.

Para una persona que quiere glorificar a Dios es una prioridad hacer el bien a los demás, ser amable, bondadoso, misericordioso, ayudador, cariñoso, compasivo, etc., y todo esto hacerlo con excelencia.

Con toda seguridad la persona que esté llevando este estilo de vida tiene una buena reputación y es digno de consideración y respeto, por lo que es bien recibido donde quiera que vaya y fácilmente puede hablar de Cristo sin ser rechazado porque su vida habla más alto que sus palabras: ¡Soy cristiano! ¡Cristo cambió mi vida!

Hacer lo correcto no es difícil, pero SI se requiere la guianza y el poder de Dios obrando en la vida. También es necesario conocer las Escrituras y la convicción de obedecerlas sin argumentar.

Estar segura que aunque en determinado momento no sea fácil enfrentarse a una sociedad que “a lo malo llama bueno”, delante de Dios vamos a responder por todo lo que hagamos… y también por todo lo que dejemos de hacer.

Para glorificar a Dios con tu vida no es obligatorio “ganar medallas” o “ganar premios”. Lo que si es necesario es que tu vida merezca el respeto de los demás porque siempre eliges tomar el buen camino y vivir tu vida con excelencia.

Te animamos a que te comprometas a pasar tiempo con Dios todos los días. Si de verdad lo haces, se desarrollará el carácter de Dios en Ti, tu vida se transformará y el resultado será que le traerás gloria a nuestro Padre que está en los cielos. 🙋‍♀️💜

#LunesDeReflexión #NuevaMujer #UnaVozDeDiosParaTi

QUIÉN ES UNA GRAN MUJER

QUIEN ES UNAGRAN MUJER

Toda mujer, en las diferentes épocas de su vida, desea ser grande, aplaudida, reconocida, exaltada, premiada, condecorada, etc.; en fin, lo que desea es sentirse bien consigo misma y que otros vean lo bien que hace las cosas, o lo buena que es.

Las mujeres, a lo largo de su vida, desempeñan diferentes funciones y cumplen distintos papeles, sin embargo hay una función que muchas veces no se reconoce en toda su dimensión e importancia: ser Madre.

Cita un dicho: Detrás de un gran hombre hay una gran mujer, y es la que con sus manos mece la cuna.

Ella es la que ama incondicionalmente, es la que da todo, todos los días.

Hay un dicho que dice “No pierde la que se cae, pierde la que no se levanta”. Podemos ver las marcas, las cicatrices, que nos ha dejado la vida, tanto física como emocionalmente, y podemos decirle a otras personas “aquí está la marca”, pero no podemos permitir que esas marcas gobiernen o guíen nuestra vida.

Una gran mujer no se queda estancada, en lugar de quedarse estancada alimentándose por las marcas que le ha dejado ese mundo, recibe su sentido de vivir de la enseñanza que Dios da en Su Palabra, Su dirección.

La gran mujer no se deja marcar por este mundo, sino se deja marcar, sellar, cincelar por la verdad de Dios, siendo esta su inspiración y la norma que rige su vida, la brújula que le señala hacia donde seguir y así no perderse en el mar de ideas y confusión de este mundo.

Sabiendo que Dios no prometió días sin dolor, ni risa sin tristeza, ni sol sin lluvia, pero si prometió fuerza para tu día, consuelo para tus lágrimas, y luz para tu camino: 13 Yo soy el Señor, tu Dios, que te sostiene por la mano derecha y te dice: No tengas miedo, que yo te ayudo.”  Isaías 41:13 versión RVC