«Y salió Jesús y vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos, porque eran como ovejas que no tenían pastor; y comenzó a enseñarles muchas cosas.» Marcos 6:34

Este y otros relatos expresan vívidamente la compasión y el poder milagroso de Jesús. Jesús vio que necesitaban un pastor que los cuidara, que les enseñara, que los alimentara, que los sanara, y como tuvo compasión de ellos suplió todas estas necesidades.

En el Antiguo Testamento también encontramos el relato de la alimentación milagrosa, con el Mana, de los israelitas en el desierto y una multiplicación de los panes de Eliseo en 2 Reyes 4:42-44 

La compasión de Dios se pone de manifiesto cuando Él ve nuestra necesidad y la suple de una manera milagrosa.

¡¡Nuevas son cada mañana sus misericordias y grande es su fidelidad!! Oramos para que puedas seguir experimentando todo lo bueno que Dios es contigo y tu familia.

¡Feliz semana!

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