¡Que tengas una excelente semana!

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«El acto de empoderar a otros, cambia vidas, y una de las más grandes cosas acerca de esto es que todos salen ganando, tú y la gente que empoderas”. John Maxwell

El término empoderar se empezó a utilizar en la “Conferencia Mundial de las Mujeres”, realizada en Beijing en 1995, refiriéndose al aumento de la participación de las mujeres en los procesos de toma de decisiones y acceso al poder.

El diccionario dice: Empoderar = es hacer poderoso o fuerte a un individuo o grupo social desfavorecido. (Real Academia Española)

¿Cómo te sientes al leer la escritura de Proverbios 31:10-31?, es irritable o consideras que encajas exactamente en el modelo de mujer que ahí se describe, algunas prefieren ignorarlo, porque no creen que pueda ser cierto que exista una mujer con todas las cualidades que ahí se describen, otras mujeres se sienten mal al hablar de este modelo de mujer, porque les resulta inalcanzable, y otras se sienten motivadas a ser como ella.

¿Será que existe alguna mujer que pueda hacer todo lo que describe este proverbio?

Estar al pendiente del cuidado de la casa, atender nuestras obligaciones, tener una buena relación con el esposo y la familia, ser buena administradora, dueña de su propia empresa, tener habilidades en la fabricación de ropa, en bienes raíces y algunas cosas más, no era tarea fácil.

Si podemos considerar la lista de las virtudes de la mujer virtuosa, hay poder, habilidades, aptitudes, talentos, destrezas, etc., en nosotras que muchas veces desconocemos; el mismo apóstol Pablo después de muchas dificultades, dice: “TODO LO PUEDO EN CRISTO QUE ME FORTALECE”, Filipenses 4:13.

EMPODERARTE es saber que en Dios, tenemos la capacidad para cambiar o corregir cosas y actitudes que no están de acuerdo con la voluntad de Dios.
A los ojos de Dios tanto hombres como mujeres son iguales, Dios no hace acepción de personas, sin embargo, Él nos da diferentes dones a todos y todas, diferentes funciones, por ejemplo, en el matrimonio, el varón es la cabeza, pero en otros ámbitos podemos tener otras funciones, por ejemplo, en una empresa, o en el gobierno civil, puede ser un hombre o una mujer la que ocupe un puesto de autoridad, de todas formas el consejo de Dios es: “…que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura, conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno”. Romanos 12:3b.

Debemos también promover entre nosotras la educación, la formación y el desarrollo profesional, debemos ayudar a construir autoestima y confianza en lo que podemos ser y hacer POR LA GRACIA Y EL PODER DE DIOS en nosotras y las personas alrededor nuestro, recordando que Dios nos ha dado habilidades, dones y virtudes.

Como conclusión: Al reconocer a Jesús en nuestra vida como Señor y Salvador, recibimos Su poder y podemos ser transformadas en Nuevas Mujeres, el plan de Dios es empoderarnos, que tomemos el valor, el precio, que Él nos dio.